sábado, 13 de agosto de 2011

EE.UU es AA+, ya no pertenece al club de los ricos. ¿Qué pasa?


*Manuel Antonio Temponi Rodríguez

En los últimos días, diversos medios comunicación: New York Times, El País de España, Pagina 12 de Argentina, Universal de México, BBC de Londres, The Guardian, muchos habremos visto titulares como estos: “Standard and Poor's rebaja el crédito a EEUU y profundiza la polarización política”, “Standard & Poors reduce nota a Estados Unidos”, entre otros. Inmediatamente, salieron los “expertos” del mercado a realizar sus análisis, teníamos para todos los gustos y colores, la mayoría de ellos señalaban: “ el problema de la deuda es un asunto fiscal”, sin tocar el tema de fondo, es decir, la solución a la crisis es incrementar la aplicación del paquete neoliberal, a una población gravemente golpeada por la disminución del llamado “estado de bienestar”: un índice de desempleo general de 9,1 %, en el segmento de los jóvenes 25%, afro-americanos 15.9% e hispanos al 11,3% (Ministerio del trabajo de EE.UU, julio 2011).

Agencias Calificadoras

Para empezar, es conveniente definir el concepto de grado de inversión: “….puede considerarse como la "nota aprobatoria" otorgada por las agencias clasificadoras de riesgo a la deuda de un país; es decir, que estas agencias afirmen que tienen confianza en que las obligaciones estudiadas serán cubiertas oportunamente por el país deudor….” (ProInversión, 2011); tenemos notas que van desde AAA (óptima) y D (desaprobatoria), para ello toman factores tales como: crecimiento y estructura económica, flexibilidad monetaria y fiscal, niveles relativos de endeudamiento, liquidez y otros más.

Cabe destacar, que según las agencias calificadoras de riesgo crediticio dominantes en el mercado (Fitch Ratings, Standard & Poor's y Moody's), asignan de manera “imparcial” la nota a cada país. ¿Será cierto?, ¿qué creen ustedes?, la respuesta definitivamente es un rotundo NO, porque son empresas, que responden a ciertos intereses, veamos el caso de la crisis SUBPRIME, “Una investigación llevada a cabo por el Senado estadounidense concluyó que dos importantes agencias calificadoras de riesgo ayudaron a los bancos a ocultar los riesgos de inversiones que estos promocionaban poco antes de que estallara la crisis financiera en Estados Unidos” (BBC de Londres, 2011).

Causas de la disminución de la calificación crediticia.

1-Con el fin de la II Guerra Mundial, nace un sistema financiero mundial, que tiene como moneda de referencia al dólar. Esto le ha permitido al gobierno de los EE.UU emitir deuda sin control, para mantener un nivel de consumo que no va acorde con su producción real de bienes y servicios.

2- Recordemos, que los países poseen parte importante de sus reservas internacionales en dólares, concediéndole (Reserva Federal) el mecanismo de transferencia de la riqueza mediante su moneda (EE.UU). Tomando como base la onza de oro, podremos ver la devaluación del dólar en los últimos años “Con $ 100.000 a finales de 2000 se compraban 364,36 onzas de oro; con esa misma cantidad de dólares, a finales de julio de 2011 se podía comprar sólo 61,41 onzas, una devaluación del 83,15%” (Attilio Folliero y Cecilia Laya, 2011). Es decir, de esta forma se apoderan del ahorro nacional de los países de la tierra, porque con la crisis se elevan los precios finales de los bienes y servicios, requiriendo los países compradores mayor cantidad de dólares (¿Qué institución se encarga de manejar el flujo monetario para el comercio mundial?), por eso “que se me conceda el control de la moneda de una nación y me río de quien hace sus leyes” (Even, 1939).

3- Antes que el parlamento estadounidense elevara el techo de la deuda a 16, 7 billones de dólares. Los mayores tenedores eran: “Fondo de Seguridad Social de Fondos Fiduciarios de EE. UU. (Social Security Trust Fund): 2,67 billones, Departamento del Tesoro de EE. UU: 1.63 billones de dólares, China: 1,16 billones de dólares, Hogares de EE. UU.: 959.400 millones de dólares, Japón: 912.400 millones de dólares, Gobiernos estatales y locales: 506.100 millones de dólares, Fondos de pensiones privados: 504.700 millones de dólares...............” (Russia Today, agosto 2011). Una interpretación muy somera, nos indica como el gobierno federal de EE.UU ha puesto en peligro el futuro de sus propios conciudadanos, no sólo destinando menos presupuesto al tema social, sino poniendo en vilo el ahorro de toda una vida de las familias estadounidenses.

4- En la crisis de los años 80 en EE.UU, se quebró el llamado “estado de bienestar”. Transcurría la era Reagan-Thatcher, dos iconos de neoliberalismo (Milton Friedman) a ultranza, ejecutores de duras recetas a sus propios países y al resto de la humanidad. Reagan de la mano con Paul Volcker, implemetó medidas conservadoras: contraer la masa monetaria con el aumento de las tasas de interés, reducción de impuestos a los grupos de mayores ingresos que se mantuvieron en sucesivos gobiernos incluidos el de Obama, elevación del gasto militar y la eliminación de “complicaciones” para echar andar la banca de inversión y comercial (SUB-PRIME).

Presente de la economía mundial

El escenario global, “el orden internacional actual ha empezado a hundirse de verdad mientras su potencia líder vive de fiado y jaqueada por una derecha cínicamente imbécil” (Hildebrant, agosto 2011). De ambos lados de Atlántico, con EE.UU haciendo malabarismo y una Europa “mírame pero no me toques”, las probabilidades de una recesión global esta ad portas, lo cual, significaría una caída del intercambio comercial, ocasionando menores ingresos, impactando los presupuestos nacionales. Por ese motivo, todos los gobiernos del mundo están procurando tomar medidas de contención, para que la afectación sea lo menor posible.

De toda esta situación de la economía mundial, algo le queda muy claro a la gente de todos los espectros ideológicos, Santos en la cumbre de la Unasur realizada en Lima en el mes de julio dijo “”América Latina está sentada sobre (una reserva) de 700 billones de dólares. Cualquier señal o cualquier indicación que pueda salir de una reunión de esos Ministros de Hacienda van a tener un peso específico. Si queremos ser relevantes como Unasur o como América Latina, ese es el tipo de coyuntura que no se debe pasar por alto”” (Telesur, julio 2011).

Es una muestra, que ni los aliados más cercanos a las políticas neoliberales confían en las acciones emanadas desde el gobierno de Washington, y buscan soluciones alternativas para salvaguardar sus economías.

Posibles Soluciones

1) Fortalecer mecanismos (aún no está en plena marcha) como el Banco del Sur; con sede principal en Caracas y una sub-sede en Buenos Aires, iniciativa del presidente venezolano Hugo Chávez, respaldada por otros mandatarios: Cristina Kirchner, Rafael Correa, Evo Morales entre otros. Su objetivo es servir de soporte para una nueva arquitectura financiera y busca “romper esa atadura con los organismos financieros” (Pagina 12, septiembre 2009). El concepto radica en unificar las reservas nacionales de los países, que en estos precisos instantes están depositadas en bancos del norte sirviendo como motor para su desarrollo. Las principales tareas deberían ser: a) cumplir con la labor de banca de inversión, como fuente de financiamiento para la creación de la infraestructura para el desarrollo nacional de cada país y b) banca de estabilización, cuando alguno de sus miembros este pasando por un desbalance presupuestario temporal, se saldría al respaldo sacándolo de la dificultad.

2) Fomentar una moneda regional en Unasur; ampliando el radio de acción del Sistema Único de Compensación Regional (SUCRE) que comprende: Venezuela, Cuba, Antigua y Barbuda, Bolivia, Dominica, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas y Ecuador. Es una moneda de intercambio virtual, diseñada por el Economista Rafael Correa (Presidente del Ecuador), en alguna oportunidad dio un ejemplo de su uso “si Ecuador le vende en productos, bienes o servicios unos 150 millones de dólares a Venezuela y le compra 100 millones, normalmente se requerirían 250 millones de dólares para realizar ese intercambio. Con el Sucre si yo le vendí más de lo que le compre a Venezuela ellos me tendrían que dar solamente la diferencia, o sea, 50 millones, cómo se pagan los importadores compensándose internamente en moneda nacional” (Correo del Orinoco, junio de 2010).

3) Incrementar el comercio intrarregional, diversificar las economías de los estados miembros de la Unasur re-direccionando las exportaciones e importaciones a los estados miembros, disminuyendo la dependencia de nuestros ingresos de bloques extra-regionales. Poner como prioridad nacional, en los países que no lo sea, la agenda de la integración sudamericana en todas sus dimensiones: social, cultural, política y económica. En otras palabras, la integración se consolidará cuando realmente los habitantes se sientan participe del proyecto NUESTRO AMERICANO, para ello los gobiernos deben de generar políticas que coadyuven para tal fin.

Por todo los antes dicho, al observar una serie de hechos en distintas latitudes: Chile, Libia, Siria, Israel, Grecia, España, Reino Unido y Estados Unidos, son fuertes evidencias que el modelo imperante se desgastó y surgen fuerzas renovadoras que impulsan un cambio, de un mundo más solidario y al unisonó dicen “there is an alternative”. Por tal razón, la respuesta sudamericana y continental debe ser, la reafirmación del espíritu BOLIVARIANO del Congreso Anfictiónico de Panamá: “Diferir más tiempo la asamblea general de los plenipotenciarios de las repúblicas que de hecho están ya confederadas, hasta que se verifique la accesión de los demás, sería privarnos de las ventajas que produciría aquella asamblea desde su instalación. Estas ventajas se aumentan prodigiosamente, si se contempla el cuadro que nos ofrece el mundo político, y muy particularmente, el continente europeo”.

*http://manueltemponi1981.blogspot.com/

lunes, 1 de agosto de 2011

El drama de EEUU por la deuda se reduce a una solución neoliberal

David Brooks

La gran disputa política sobre la deuda y el déficit presupuestario de las semanas recientes en Washington oculta algo sorprendente detrás del humo de discordia, ataques retóricos entre y dentro de los dos partidos y tanta atención sobre la polarización política: existe entre las cúpulas políticas un consenso que está a la derecha de la opinión pública.

Por ello, desde hace días, los expertos y analistas confiaban en que los adultos de Washington lograrían poner fin a esta crisis fabricada (Estados Unidos no está a punto de entrar en bancarrota, aún es el país más rico del mundo y obviamente tiene los recursos para pagar las operaciones de su gobierno).

Desde hace más de una semana, líderes demócratas y republicanos han indicado que no hay mucha diferencia entre sus propuestas, y que un acuerdo está al alcance. Todas estas iniciativas incluyen severos recortes a programas sociales y muy pocos recursos, si acaso, a medidas para incrementar el ingreso (a través de impuestos a los más ricos, por ejemplo).

Algunos sugieren que la mejor manera de caracterizar esta coyuntura es con la broma de que sí hay una luz al final del túnel, pero es la de un tren que viene para aplastarnos a todos.

Washington es disfuncional, fue el coro entre observadores, ciudadanos y hasta los mismos políticos que estaban en medio de la disputa que captó la atención mundial al prolongarse el debate para elevar el techo de la deuda federal hasta las últimas horas.

Sin embargo, detrás del escenario se estaba negociando algo más que el techo de la deuda. Las cúpulas de ambos partidos elaboran un acuerdo que en esencia es la receta neoliberal de reducir aún más el sistema de bienestar social a cambio de satisfacer las demandas de Wall Street y los dueños del crédito mundial. O sea, mayor austeridad a nombre de algo llamado responsabilidad fiscal.

Cuando uno de cada seis estadunidenses está desempleado, hay mayor pobreza, la crisis hipotecaria no tiene solución y nuevas estadísticas oficiales destacan que la gran recesión de 2007 a 2009 fue más profunda y amplia de lo sospechado, y la recuperación actual más frágil de lo pensado, prominentes economistas como los premios Nobel Paul Krugman y Joseph Stiglitz advierten que las recetas propuestas por la cúpula política para abordar el asunto de la deuda y el déficit sólo empeorarán la situación. El empleo y estímulo económico, argumentan, es la clave, no el déficit, en coyunturas como ésta.

Pero Barack Obama y los republicanos han definido el déficit como el punto central del momento. La desaparición del desempleo en el discurso de la élite política y su sustitución por el pánico del déficit es verdaderamente notable, afirma Krugman en su columna del New York Times. Esto, señala, no es compartido por el sentimiento público; encuestas recientes, como una de CBS News/New York Times, registran que las mayorías identifican la economía y empleo como las supremas prioridades; el déficit sólo es mencionado por un 7 por ciento.

El consenso de la cúpula política (de ambos partidos) en Washington es que cualquier acuerdo debe centrarse en mayor austeridad, o sea reducciones en el gasto público, muy parecido a lo que se está aplicando en Europa. Para aquellos que conocen la historia de los años 30, esto es muy familiar, advierte Krugman, y señala que si fracasan las negociaciones sobre la deuda se puede repetir lo de 1931, con el colapso del sistema bancario que profundizó la gran depresión. Pero, si las negociaciones son exitosas, estaremos listos para repetir el gran error de 1937: el giro prematuro a la contracción fiscal que descarriló la recuperación económica y aseguró que la recesión durara hasta que la Segunda Guerra Mundial finalmente ofreció el impulso que necesitaba la economía.

Stiglitz, en los meses recientes, ha subrayado que lo más importante para abordar el déficit presupuestario es la generación del empleo y el crecimiento económico. “Si uno está gastando fondos para inversiones que incrementan la productividad de la economía –infraestructura, tecnología, educación–, eso tiene dos efectos: impulsa el crecimiento económico hoy, pone a la gente a trabajar, pero también incrementa el potencial futuro de la producción económica… eso implica más ingreso de impuestos…. Hay que invertir en el futuro y hacer crecer la economía hoy”, señaló a National Public Radio.

Robert Reich, ex secretario de Trabajo de Bill Clinton y profesor de políticas públicas en la Universidad de California, recuerda que el déficit presupuestario no tiene ninguna relación económica con el límite de deuda. Los republicanos han vinculado las dos cosas y el gobierno de Obama ha jugado ahí, y acusó que los republicanos están usando una votación técnica de rutina sobre el techo de la deuda como manera para tomar como rehén a la nación con su objetivo político de reducir el tamaño de gobierno federal.

Subrayó: “en realidad estamos en una crisis de ‘empleo y crecimiento’, no una crisis del presupuesto. Y la mejor manera de generar empleo y crecimiento es que el gobierno gaste más ahora mismo, no menos”.

Hasta el New York Times está sorprendido y alarmado. En su editorial de este domingo afirmó: dejaremos a los historiadores que expliquen cómo ambos partidos políticos, y muchos estadunidenses, se convencieron de que la austeridad es el camino a la recuperación. Agregó que la situación económica actual requiere de asistencia del gobierno, pero está ocurriendo lo opuesto, y agrega: con una economía débil y tasas de interés bajas, la austeridad no tiene sentido.

Las nuevas estadísticas del gobierno dadas a conocer la semana pasada registraron que la gran recesión fue más grande de lo pensado, y que la recuperación ha sido más anémica de lo reportado inicialmente. También informan que las empresas tuvieron más ganancias, mientras a los trabajadores les fue aún peor.

Las utilidades antes de impuestos de las empresas se incrementaron 264.9 mil millones de dólares a lo largo de los pasados tres años: las más prosperas fueron las del sector financiero.

A la vez, el ingreso personal promedio ajustado por inflación sólo se incrementó 0.6 por ciento entre 2008 y 2010, la mitad de lo antes calculado. Por cierto, el ingreso personal promedio se desplomó 2.3 por ciento en 2009 (se había calculado anteriormente que se había incrementado 0.6 por ciento): fue la primera vez que disminuyó desde 1974 y el desplome más grave desde 1947, informó la agencia Bloomberg.

Los ricos se están haciendo más ricos. Su tasa de impuesto efectivo, en años recientes, se ha reducido al punto más bajo en la historia moderna. De hecho, enfermeras, maestros y bomberos pagan una tasa más alta que algunos multimillonarios, escribió el senador Bernie Sanders en el Wall Street Journal, donde criticó a los republicanos por defender los intereses de los más ricos, y también la decisión de Obama y otros líderes demócratas de proceder en la misma dirección con sus propuestas de recortes para los más necesitados, todo opuesto a la opinión pública mayoritaria.

“En otras palabras, el Congreso está en un camino de hacer justo lo que el pueblo estadunidense no quiere… No es sorprendente, por ello, que el pueblo estadunidense esté tan furioso con lo que pasa en Washington. Yo también.”

Todo esto es producto de lo que Stiglitz llama un sistema del uno por ciento por el uno por ciento y para el uno por ciento, o sea, un sistema político y económico dominado por la capa más rica.

Señala que ese uno por ciento capta ahora casi una cuarta parte del ingreso nacional, y controla 40 por ciento de la riqueza, y los de en medio han visto nulo crecimiento. Todo el crecimiento económico en décadas recientes se ha concentrado en el segmento más rico, resumió en Vanity Fair hace un par de meses. Eso, dice, implica que ejerce un enorme poder sobre la toma de decisiones en este país, y por ello no sorprenden las propuestas de política económica que se están promoviendo en Washington.

Ahí viene el tren.

Cede Obama ante republicanos

Después de una intensa negociación de última hora entre el liderazgo político supremo del país, el presidente Barack Obama anunció en la Casa Blanca, en un mensaje trasmitido en vivo al mundo:líderes de ambos partidos en ambas cámaras han logrado un acuerdo que reducirá el déficit y evitará el incumplimiento (de pagos), que hubiera tenido un efecto devastador sobre nuestra economía.

Apenas 48 horas antes de que el gobierno había advertido que dejaría de poder cumplir con sus obligaciones financieras, Obama informó que el acuerdo eleva el techo de la deuda (actualmente de 14.3 billones de dólares) y propone aproximadamente 2.5 billones en recortes del gasto público a lo largo de los próximos 10 años. Aunque, dijo, no es el acuerdo que hubiera deseado, logra poner fin a un proceso que fue demasiado largoy desordenado.

Obama instó a los legisladores a aprobar la propuesta negociada en los próximos días. El acuerdo tendrá que ser sujeto a un voto en las dos cámaras del Congreso y después promulgado por Obama, proceso que comenzará este lunes.

Qué tanto dure el proceso dependerá de las dificultades en negociar suficientes votos para la aprobación del acuerdo, sobre todo en la Cámara de Representantes. Ahí, tanto legisladores demócratas liberales como algunos republicanos ultraconservadores han expresado su renuencia a votar en favor del acuerdo.

El acuerdo incluye una primera etapa de recortes de poco menos de un billón de dólares en el gasto federal, y establece una comisión bipartidista para recomendar otros 1.5 billones de dólares más en recortes al presupuesto, que serán aplicados más tarde por acción legislativa o de manera automática (si el Congreso falla en actuar), los cuales afectarán desde el gasto militar hasta los programas sociales.

Pocas horas antes, con indicios de un acuerdo inminente, cambió el clima en Washington y Wall Street al percibirse que la cúpula política estaba finalmente a punto de resolver lo que se convirtió casi en una crisis nacional. Los mercados financieros empezaron a responder de manera positiva ante la expectativa del anuncio de un acuerdo y una votación legislativa sobre el asunto.

Pero las consecuencias políticas continuarán manifestándose de aquí en adelante. Después de semanas de intensa disputa sobre el asunto, que alarmó a los mercados financieros y fastidió a los ciudadanos, el espectáculo político en Washington podría tener severas consecuencias electorales tanto para el presidente Obama como para el liderazgo republicano.

De hecho, para algunos analistas, todo esto fue más teatro político con fines electorales que una disputa por el asunto de la deuda. Elevar ese techo es casi siempre un procedimiento automático, y se ha hecho en promedio casi dos veces al año desde 1940 sin nada parecido a lo que ocurrió en esta ocasión, señalan.

Más bien, demócratas y republicanos aceptaron vincular el tema de la deuda con el asunto siempre espinoso del presupuesto federal.

A lo largo de la disputa siempre había un consenso básico entre líderes demócratas y republicanos sobre una receta de recortes masivos al gasto público para abordar el tema del déficit presupuestario. El desacuerdo fue más bien sobre el tamaño y rubros de la reducción del gasto.

El propio presidente Obama demostró, desde hace semanas, su disposición a ceder ante demandas republicanas de reducciones incluso en programas sociales para los más necesitados, como el Medicare y el Seguro Social, y no insistir en un incremento sustancial de los impuestos de los más ricos para abordar el déficit (esto a pesar de que 72 por ciento de los estadunidenses favorece justo lo opuesto: más impuestos sobre los más ricos para abordar el déficit, según una encuesta reciente del Washington Post/ABC News).

Con ello, Obama ha provocado ira entre sus propias bases. Críticos señalan que las concesiones de Obama y el liderazgo demócrata están a laderecha hasta de algunos republicanos moderados, tanto así que uno de los encargados de política económica del presidente Ronald Reagan, Bruce Bartlett, expresó su sorpresa y concluyó que en los hechos Obama es en esencia un conservador moderado.

Pero el liderazgo republicano también enfrentó problemas con un sector de su base cada vez más poderoso, la corriente ultraconservadora identificada con el llamado Tea Party, que casi logró derrotar la iniciativa del propio líder en la Cámara, John Boehner, y puso en jaque su autoridad.

Los aproximadamente 80 legisladores ligados al Tea Partydefendieron su principio ideológico de reducir al máximo el gobierno y los programas de bienestar social, a tal punto que descarrilaron las negociaciones entre las cúpulas de ambos partidos durante semanas.

Paul Krugman escribió en su columna del New York Times que lo que está ocurriendo es una crisis donde la derecha está haciendo demandas locas, mientras el presidente y los demócratas en el Congreso se doblan hacia atrás para acomodarlos, ofreciendo planes que son todo recorte de gastos y nada de impuestos, planes que están muy a la derecha de la opinión pública.

(Tomado de La Jornada de México)

domingo, 24 de julio de 2011

Cómo comencé a escribir


Caracas, Venezuela, 3 de mayo de 1970


Primero que todo, perdónenme que hable sentado, pero la verdad es que si me levanto corro el riesgo de caerme de miedo. De veras. Yo siempre creí que los cinco minutos más terribles de mi vida me tocaría pasarlos en un avión y delante de veinte a treinta personas, no delante de doscientos amigos como ahora. Afortunadamente, lo que me sucede en este momento me permite empezar a hablar de mi literatura, ya que estaba pensando que yo comencé a ser escritor en la misma forma que me subí a este estrado: a la fuerza. Confieso que hice todo lo posible por no asistir a esta asamblea: traté de enfermarme, busqué que me diera una pulmonía, fui a donde el peluquero con la esperanza de que me degollara y, por último, se me ocurrió la idea de venir sin saco y sin corbata para que no me permitieran entrar en una reunión tan formal como ésta, pero olvidaba que estaba en Venezuela, en donde a todas partes se puede ir en camisa. Resultado: que aquí estoy y no sé por dónde empezar. Pero les puedo contar, por ejemplo, cómo comencé a escribir.

A mí nunca se me había ocurrido que pudiera ser escritor pero, en mis tiempos de estudiante, Eduardo Zalamea Borda, director del suplemento literario de El Espectador de Bogotá, publicó una nota donde decía que las nuevas generaciones de escritores no ofrecían nada, que no se veía por ninguna parte un nuevo cuentista ni un nuevo novelista. Y concluía afirmando que a él se le reprochaba porque en su periódico no publicaba sino firmas muy conocidas de escritores viejos, y nada de jóvenes en cambio, cuando la verdad -dijo- es que no hay jóvenes que escriban.

A mí me salió entonces un sentimiento de solidaridad para con mis compañeros de generación y resolví escribir un cuento, nomás por taparle la boca a Eduardo Zalamea Borda, que era mi gran amigo, o al menos que después llegó a ser mi gran amigo. Me senté y escribí el cuento, lo mandé a El Espectador. El segundo susto lo obtuve el domingo siguiente cuando abrí el periódico y a toda página estaba mi cuento con una nota donde Eduardo Zalamea Borda reconocía que se había equivocado, porque evidentemente con «ese cuento surgía el genio de la literatura colombiana» o algo parecido.

Esta vez sí que me enfermé y me dije: «¡En qué lío me he metido! ¿Y ahora qué hago para no hacer quedar mal a Eduardo Zalamea Borda?». Seguir escribiendo, era la respuesta. Siempre tenía frente a mí el problema de los temas: estaba obligado a buscarme el cuento para poderlo escribir.

Y esto me permite decirles una cosa que compruebo ahora, después de haber publicado cinco libros: el oficio de escritor es tal vez el único que se hace más difícil a medida que más se practica. La facilidad con que yo me senté a escribir aquel cuento una tarde no puede compararse con el trabajo que me cuesta ahora escribir una página. En cuanto a mi método de trabajo, es bastante coherente con esto que les estoy diciendo. Nunca sé cuánto voy a poder escribir ni qué voy a escribir. Espero que se me ocurra algo y, cuando se me ocurre una idea que juzgo buena para escribirla, me pongo a darle vueltas en la cabeza y dejo que se vaya madurando. Cuando la tengo terminada (y a veces pasan muchos años, como en el caso de Cien años de soledad, que pasé diecinueve años pensándola), cuando la tengo terminada, repito, entonces me siento a escribirla y ahí empieza la parte más difícil y la que más me aburre. Porque lo más delicioso de la historia es concebirla, irla redondeando, dándole vueltas y revueltas, de manera que a la hora de sentarse a escribirla ya no le interesa a uno mucho, o al menos a mí no me interesa mucho; la idea que le da vueltas.

Les voy a contar, por ejemplo, la idea que me está dando vueltas en la cabeza hace ya varios años y sospecho que la tengo ya bastante redonda. Se las cuento ahora, porque seguramente cuando la escriba, no sé cuándo, ustedes la van a encontrar completamente distinta y podrán observar en qué forma evolucionó. Imagínense un pueblo muy pequeño donde hay una señora vieja que tiene dos hijos, uno de diecisiete y una hija menor de catorce. Está sirviéndoles el desayuno a sus hijos y se le advierte una expresión muy preocupada. Los hijos le preguntan qué le pasa y ella responde: «No sé, pero he amanecido con el pensamiento de que algo muy grave va a suceder en este pueblo».

Ellos se ríen de ella, dicen que ésos son presentimientos de vieja, cosas que pasan. El hijo se va a jugar billar, y en el momento en que va a tirar una carambola sencillísima, el adversario le dice: «Te apuesto un peso a que no la haces». Todos se ríen, él se ríe, tira la carambola y no la hace. Paga un peso y le pregunta: «¿Pero qué pasó, si era una carambola tan sencilla?». Dice: «Es cierto, pero me ha quedado la preocupación de una cosa que me dijo mi mamá esta mañana sobre algo grave que va a suceder en este pueblo». Todos se ríen de él y el que se ha ganado el peso regresa a su casa, donde está su mamá y una prima o una nieta o en fin, cualquier parienta. Feliz con su peso dice: «Le gané este peso a Dámaso en la forma más sencilla, porque es un tonto». «¿Y por qué es un tonto?». Dice: «Hombre, porque no pudo hacer una carambola sencillísima estorbado por la preocupación de que su mamá amaneció hoy con la idea de que algo muy grave va a suceder en este pueblo».

Entonces le dice la mamá: «No te burles de los presentimientos de los viejos, porque a veces salen». La parienta lo oye y va a comprar carne. Ella dice al carnicero: «Véndame una libra de carne» y, en el momento en que está cortando, agrega: «Mejor véndame dos porque andan diciendo que algo grave va a pasar y lo mejor es estar preparado». El carnicero despacha su carne y cuando llega otra señora a comprar una libra de carne, le dice: «Lleve dos porque hasta aquí llega la gente diciendo que algo muy grave va a pasar, y se está preparando, y andan comprando cosas».

Entonces la vieja responde: «Tengo varios hijos; mire, mejor déme cuatro libras». Se lleva cuatro libras y para no hacer largo el cuento, diré que el carnicero en media hora agota la carne, mata otra vaca, se vende toda y se va esparciendo el rumor. Llega el momento en que todo el mundo en el pueblo está esperando que pase algo. Se paralizan las actividades y de pronto, a las dos de la tarde, hace calor como siempre. Alguien dice: «Se han dado cuenta del calor que está haciendo?». «Pero si en este pueblo siempre ha hecho calor.» Tanto calor que es un pueblo donde todos los músicos tenían instrumentos remendados con brea y tocaban siempre a la sombra porque si tocaban al sol se les caían a pedazos. «Sin embargo -dice uno-, nunca a esta hora ha hecho tanto calor.» «Sí, pero no tanto calor como ahora.» Al pueblo desierto, a la plaza desierta, baja de pronto un pajarito y se corre la voz: «Hay un pajarito en la plaza». Y viene todo el mundo espantado a ver el pajarito.

«Pero, señores, siempre ha habido pajaritos que bajan.» «Sí, pero nunca a esta hora.» Llega un momento de tal tensión para los habitantes del pueblo que todos están desesperados por irse y no tienen el valor de hacerlo. «Yo sí soy muy macho -grita uno-, yo me voy.» Agarra sus muebles, sus hijos, sus animales, los mete en una carreta y atraviesa la calle central donde está el pobre pueblo viéndolo. Hasta el momento en que dicen: «Si éste se atreve a irse, pues nosotros también nos vamos», y empiezan a desmantelar literalmente al pueblo. Se llevan las cosas, los animales, todo. Y uno de los últimos que abandona el pueblo dice: «Que no venga la desgracia a caer sobre todo lo que queda de nuestra casa» y entonces incendia la casa y otros incendian otras casas. Huyen en un tremendo y verdadero pánico, como en éxodo de guerra, y en medio de ellos va la señora que tuvo el presagio clamando: «Yo lo dije, que algo muy grave iba a pasar y me dijeron que estaba loca».

Fuente: http://www.eluniversal.com.mx/cultura/64116.html

sábado, 23 de julio de 2011

EL LIBRO OCUPA EL ESPACIO PARA LA TRANSFORMACIÓN DE LAS SOCIEDADES


Lima, 20 de julio de 2011.-
Una de las formas para que avance un país en materia educativa es que haya una política editorial y una difusión editorial amplia, aseguró el embajador designado de la República Bolivariana de Venezuela en el Perú, Alexander Yánez, durante su intervención en la ceremonia de inauguración de la 16ª edición de la Feria Internacional del Libro de Lima 2011.

El diplomático venezolano inició sus palabras citando a El Libertador Simón Bolívar, quien advirtió, en su momento, que “las naciones marcharán hacia su grandeza con el mismo paso que marcha su Educación”, de manera de destacar que la cultura, que en Venezuela es el pueblo, a éste había que “darles las herramientas y mecanismos para acceder a la información necesaria para su realización espiritual y material”.

Alexander Yánez observó como un proceso a la inversa en cuanto a que “los libros nos leen a nosotros” y no nosotros a ellos, a fin de ilustrar la necesidad, inclusive “para la realización del libro mismo, que alguien pueda acceder al libro porque éste está hecho para que alguien lo lea y el problema se presenta cuando en los países existen grandes niveles de analfabetismo”.

Dijo que es por eso que, al menos en Venezuela se desarrolló un amplio proceso, con el apoyo de Cuba, para erradicar el analfabetismo y pasar a un nivel superior en la capacidad de comprensión lectora. Fue en el año 2005, que Venezuela fue declarada por la Unesco como país libre de Analfabetismo. Manifestó asimismo su júbilo porque en el Perú este año haya sido reconocido libre de analfabetismo.

Este aspecto lo consideró el Embajador como “un elemento muy importante porque, justamente, allí está el espacio donde van los libros, allí está el espacio fundamental de la transformación de las sociedades, a través del conocimiento que los libros nos brindan”.

Al agradecer a la Cámara Peruana del Libro la oportunidad de que en Venezuela mostrara en el Perú lo mejor de su producción editorial y cinematográfica, el embajador designado destacó la celebración de la FIL Lima, en el ámbito de otras conmemoraciones: Bicentenario de la Independencia de Venezuela, el centenario del nacimiento de José María Arguedas, el reencuentro con Machu Picchu, 100 años, celebrando el 201 aniversario de la independencia de Colombia, sellada con la batalla de Boyacá, reconocimiento, además que lleva el nombre del gran proyecto de Simón Bolívar: “la más grande de las naciones, no por su extensión y riqueza sino por su libertad y gloria: Colombia”.

- La cultura –expresó- es un instrumento fundamental para el desarrollo de esta idea bolivariana, de unidad, de transformación, de integración, y efectivamente, la cultura

En el salón César Vallejo, del recinto ferial ubicado en el Parque de los Próceres del distrito de Jesús María estuvieron presentes por parte de la delegación venezolana, la presidenta del Centro Nacional del Libro, Christhiane Valles y el poeta Gustavo Pereira, mientras que por Perú, el ministro de la Cultura, Juan Ossío, del Viceministro de Gestión Pedagógica Idel Alfonso Vexler; del presidente de la Cámara Peruana del Libro, Jaime Carbajal; del escritor Oswaldo Reynoso y del alcalde del distrito de Jesús María, Enrique Ocrospoma.

Fuente: Sección de Prensa Embajada de República Bolivariana de Venezuela en el Perú

lunes, 11 de julio de 2011

Joseph Stiglitz: La crisis ideológica del Capitalismo occidental



Project Syndicate

Tan sólo unos años atrás, una poderosa ideología –la creencia en los mercados libres y sin restricciones– llevó al mundo al borde de la ruina. Incluso en sus días de apogeo, desde principios de los años 80 hasta el año 2007, el capitalismo desrregulado al estilo estadounidense trajo mayor bienestar material sólo para los más ricos en el país más rico del mundo. De hecho, a lo largo de los 30 años de ascenso de esta ideología, la mayoría de los estadounidenses vieron que sus ingresos declinaban o se estancaban año tras año.

Es más, el crecimiento de la producción en los Estados Unidos no fue económicamente sostenible. Con tanto del ingreso nacional de los EEUU yendo destinado para tan pocos, el crecimiento sólo podía continuar a través del consumo financiado por una creciente acumulación de la deuda.

Yo estaba entre aquellos que esperaban que, de alguna manera, la crisis financiera pudiera enseñar a los estadounidenses (y a otros) una lección acerca de la necesidad de mayor igualdad, una regulación más fuerte y mejor equilibrio entre el mercado y el gobierno. Desgraciadamente, ese no ha sido el caso. Al contrario, un resurgimiento de la economía de la derecha, impulsado, como siempre, por ideologías e intereses especiales, una vez más amenaza a la economía mundial –o al menos a las economías de Europa y América, donde estas ideas continúan floreciendo.

En los EEUU, este resurgimiento de la derecha, cuyos partidarios, evidentemente, pretenden derogar las leyes básicas de las matemáticas y la economía, amenaza con obligar a una moratoria de la deuda nacional. Si el Congreso ordena gastos que superan a los ingresos, habrá un déficit, y ese déficit debe ser financiado. En vez de equilibrar cuidadosamente los beneficios de cada programa de gasto público con los costos de aumentar los impuestos para financiar dichos beneficios, la derecha busca utilizar un pesado martillo –no permitir que la deuda nacional se incremente, lo que fuerza a los gastos a limitarse a los impuestos.

Esto deja abierta la interrogante sobre qué gastos obtienen prioridad –y si los gastos para pagar intereses sobre la deuda nacional no la obtienen, una moratoria es inevitable. Además, recortar los gastos ahora, en medio de una crisis en curso provocada por la ideología de libre mercado, simple e inevitablemente sólo prolongaría la recesión.

Hace una década, en medio de un auge económico, los EEUU enfrentaba un superávit tan grande que amenazó con eliminar la deuda nacional. Incosteables reducciones de impuestos y guerras, una recesión importante y crecientes costos de atención de salud –impulsados en parte por el compromiso de la administración de George W. Bush de otorgar a las compañías farmacéuticas rienda suelta en la fijación de precios, incluso con dinero del gobierno en juego– rápidamente transformaron un enorme superávit en déficits récord en tiempos de paz.

Los remedios para el déficit de EEUU surgen inmediatamente de este diagnóstico: se debe poner a los Estados Unidos a trabajar mediante el estímulo de la economía; se debe poner fin a las guerras sin sentido; controlar los costos militares y de drogas; y aumentar impuestos, al menos a los más ricos. Pero, la derecha no quiere saber nada de esto, y en lugar de ello, está presionando para obtener aún más reducciones de impuestos para las corporaciones y los ricos, junto con los recortes de gastos en inversiones y protección social que ponen el futuro de la economía de los EEUU en peligro y que destruyen lo que queda del contrato social. Mientras tanto, el sector financiero de EEUU ha estado presionando fuertemente para liberarse de las regulaciones, de modo que pueda volver a sus anteriores formas desastrosas y despreocupadas de proceder.

Pero las cosas están un poco mejor en Europa. Mientras Grecia y otros países enfrentan crisis, la medicina en boga consiste simplemente en paquetes de austeridad y privatización desgastados por el tiempo, los cuales meramente dejarán a los países que los adoptan más pobres y vulnerables. Esta medicina fracasó en el Este de Asia, América Latina, y en otros lugares, y fracasará también en Europa en esta ronda. De hecho, ya ha fracasado en Irlanda, Letonia y Grecia.

Hay una alternativa: una estrategia de crecimiento económico apoyada por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional.

El crecimiento restauraría la confianza de que Grecia podría reembolsar sus deudas, haciendo que las tasas de interés bajen y dejando más espacio fiscal para más inversiones que propicien el crecimiento. El crecimiento por sí mismo aumenta los ingresos por impuestos y reduce la necesidad de gastos sociales, como ser las prestaciones de desempleo. Además, la confianza que esto engendra conduce aún a más crecimiento.

Lamentablemente, los mercados financieros y los economistas de derecha han entendido el problema exactamente al revés: ellos creen que la austeridad produce confianza, y que la confianza produce crecimiento. Pero la austeridad socava el crecimiento, empeorando la situación fiscal del gobierno, o al menos produciendo menos mejoras que las prometidas por los promotores de la austeridad. En ambos casos, se socava la confianza y una espiral descendente se pone en marcha.

¿Realmente necesitamos otro experimento costoso con ideas que han fracasado repetidamente? No deberíamos, y sin embargo, parece cada vez más que vamos a tener que soportar otro. Un fracaso en Europa o en Estados Unidos para volver al crecimiento sólido sería malo para la economía mundial. Un fracaso en ambos lugares sería desastroso –incluso si los principales países emergentes hubieran logrado un crecimiento auto-sostenible. Lamentablemente, a menos que prevalezcan las mentes sabias, este es el camino al cual el mundo se dirige.


El autor es profesor de la Universidad de Columbia, Premio Nobel de Economía y autor de “Freefall: Free Markets and the Sinking of the Global Economy”.

Fuente: http://cl.m.globedia.com/joseph-stiglitz-crisis-ideologica-capitalismo-occidental

jueves, 7 de julio de 2011

Camila Vallejo; estudiante chilena expone sobre la educación

Las enormes movilizaciones estudiantiles chilenas, que reclaman justamente mejores condiciones académicas, son consecuencia de las imposiciones del sistema neoliberal impuesto por dictadura de Augusto Pinochet. Aquí les presento un una entrevista realizada a Camila Vallejo (presidenta de la FECH) por parte de Chilevisión.








lunes, 27 de junio de 2011

Medios comunitarios y alternativos ejercen el periodismo de inclusión social

La inclusión, la participación y el Poder Popular forman parte de pilares fundamentales en la transformación de una nación. Venezuela constituye un eje en el que las comunidades y el pueblo son los protagonistas, no sólo de los sucesos que ocurren día tras día, sino en ese rol de comunicador.

Los medios de comunicación viciados deben comprender que la masa, no es un recurso a ser utilizado para lograr el poder y mantenerlo, más bien deben ser vistos como individuos que forman parte de un colectivo con el que se construyen posibilidades de ejercer el Poder Popular como intelectuales orgánicos.

Es por ello que en nuestro país existe una variada gama de medios de comunicación radiales, impresos, audiovisuales y web que se dedican a realizar una laborar de arraigo, de complementariedad, de lucha a brazo partido con sus iguales, en espacios donde no podrán ser cercenados, en donde la voz viva del pueblo crece a pasos agigantados.

La oligarquía mediática presume que la comunicación inclusiva de los medios comunitarios y alternativos surgió como una forma para dar a conocer sólo lo que el Gobierno desea, pero hace muchos años Mario Kaplún, de origen argentino, docente e investigador especializado en comunicación educativa-popular dejó su pasión, sentido de solidaridad y de compromiso latinoamericano una de las obras más importantes para el desarrollo de la Comunicación Popular en América Latina: “Educación para los medios”.

Los medios comunitarios y alternativos, por su parte tienen la particularidad de presentar un comunicador radiofónico, impreso, digital o audiovisual como un educador no formal, pero que tienen una gran responsabilidad en los procesos de desarrollo social en el país.

Protagonistas de medios comunitarios y alternativos alzan su voz



Foto: (Félix González)


Francisco Jiménez, director de la Radio Soberana 92,9 FM ubicada en Guanare, estado Portuguesa, fundada en el año 2002 por un grupo de personas que se organiza para informar, afirma que la radio siempre ha estado atenta y al pie de todo lo que acontece en el ámbito comunicacional.

“Desde hace algún tiempo todos los medios comunitarios de todo el país, venimos articulándonos, algunos en redes y otros en movimientos, para poder hacer una mejor comunicación a las comunidades, al pueblo”.

Jiménez puntualiza, que los medios comunitarios han evolucionando a raíz del secuestro del Presidente en 2002, es allí donde estos medios salieron a dar la cara, los que salieron a la calle y le informaron al pueblo.

“A raíz de eso han crecido en todos los estados de Venezuela y en casi todos los municipios hay representación de las radios comunitarias”, acota Jiménez.

Desde el punto de vista social, las funciones que ha ejercido Radio Soberana es articular con las comunidades, con las misiones, con los trabajadores, las amas de casa. Es un trabajo que han venido desarrollando un grupo de personas que hacen vida activa en la emisora y conjuntamente con los habitantes de la comunidad.

“Nosotros como radio no informamos directamente, sino que es el pueblo el que dice sus logros, las noticias que nacen a diario, ya que eso de los medios convencionales ya no se usa, son los medios comunitarios los que estamos tomando esa iniciativa de que sea el pueblo quien exprese sus logros”, afirma el director de Radio Soberana.




Foto: (Félix González)


Por su parte Ernesto Morales, de la publicación impresa Cantaclaro del estado Zulia, afirma que hay una diferencia entre el medio alternativo y el medio comunitario. El medio comunitario para él “funciona al calor del Consejo Comunal, a un área reducida de la zona de influencia del consejo, mientras que los medios alternativos como el caso del que yo dirijo, que es de tamaño tabloide y abarca un estado”.

Morales cuenta que el proceso de socialización de las comunidades es una nueva experiencia que está contemplada en la Ley del Ejercicio del Periodismo actual, donde se permite que los sindicatos, los partidos políticos, las creencias religiosas y los científicos, tengan un medio de comunicación si necesidad de que sus integrantes sean colegiados.

“Es más, estamos en la creación de una ley que regula el funcionamiento de estos medios, que es la Ley de Medios Alternativos, Populares y Comunitarios. En eso estamos trabajando en una propuesta de ley que proteja a estos medios”.



Foto: (Félix González)


Mientras que Freddy Gómez quien dirige El Quinto Motor, una página web que tiene su centro de origen y funcionamiento en Cabimas, estado Zulia narra lo que ha sido la historia de este portal en las web, en un mundo donde hay tanta información que es colocada muchas veces sin responsabilidad.

“Estamos desde el 2007 informando todo lo que hacen las comunidades, articulados tanto con la Alcaldía Bolivariana de Cabimas como con los consejos comunales y las comunas que se están conformando en las diferentes parroquias”.

La idea es difundir todo lo que hacen las comunidades, ya que “para nadie es un secreto que en el estado Zulia la comunicación opositora trata de ser muy fuerte”, pero lo se está haciendo, es crear una comunicación alternativa.

“Ahora más que nunca es importante el Proyecto de Ley que se está creando; es fundamental, ya que la misma le está dando cuerpo jurídico a estos medios alternativos que venimos luchando desde hace mucho tiempo”, asegura Gómez.

En cuanto a la necesidad de crear una página web para informar a la comunidad, el director de El Quinto Motor, prevé que es fundamental el uso del Internet, ya que es importante abarcar esos espacios.

La comunicación no sólo es radial e impresa, sino que la comunicación digital se ha posicionado y es allí donde “estamos aplicando esa nueva forma de comunicación, en donde estamos atrayendo no sólo a la juventud sino a las personas de mayor edad que están tomando las riendas de esa comunicación alternativa”.

En Cabimas esta página web ha llegado a las comunidades, a esas personas que no tenían esos espacios en los medios.

Los medios alternativos hacen frente a una canalla mediática que diariamente bombardea los espacios radioeléctricos con información sesgada a una línea editorial constituida por mandos impuestos a dedos, a los que desconocen la realidad de los pueblos, comunidades, barriadas, sectores populares, a ese grupo que pretende excluir al pueblo y pretende hacer de entes capitalistas el protagonista de la noticia.