Mostrando entradas con la etiqueta Portaaviones. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Portaaviones. Mostrar todas las entradas

martes, 14 de junio de 2011

Un portaaviones, símbolo de las ambiciones militares chinas



El primer portaaviones chino está casi listo para operar.

El casco enorme y gris del nuevo buque de guerra chino es el símbolo más visible del creciente poder militar de China.

Está compuesto de 60.000 toneladas de acero y descansa en el puerto de Dalian, casi listo para navegar.

El Ejército Popular de Liberación (EPL) no ha querido decir nada sobre su primer portaaviones antes de estrenar su servicio.

Pero es su secreto peor guardado. Está a la vista de todos, de forma un tanto incongruente, justo detrás del hipermercado Ikea de Delian.

El gigantesco buque de guerra estuvo años en construcción, y es una señal inequívoca de la expansión militar de China y de su deseo de proyectar más que nunca su poder más allá de sus fronteras.

"Un portaaviones es un símbolo de poder de la marina", dice el general Xu Guangyu, quién prestó servicio en el cuartel general del EPL y ahora está retirado.

"China debe estar como mínimo al mismo nivel que los otros miembros del Consejo de Seguridad de la ONU que tienen portaaviones".

El General Xu asesora al gobierno chino en su programa de modernización militar.

Siete países operan este tipo de buques en la actualidad. Eran ocho, pero el Reino Unido caba de retirar el último de los suyos y deberá esperar varios años hasta que construya uno nuevo.

"Es también un símbolo disuasorio", agrega Xu, "es como decir 'no juegues conmigo, no creas que puedes intimidarme', así que es normal que China quiera un portaaviones."

"De hecho, creo es que sería extraño que China no tuviera uno".

Desarrollo militar y desarrollo económico

Dalian no es sólo una importante base naval, también es un gran puerto comercial.

Sus dársenas bordean una bahía inmensa.

Hay una refinería de petróleo, muelles para cargueros, y astilleros en los que grúas gigantescas dominan un paisaje de enormes cascos de barcos mercantiles y buques cisterna en construcción.

"El desarrollo de nuestras fuerzas armadas está relacionado con el desarrollo de nuestra economía", afirma el General Xu.

"Nuestros intereses en recursos energéticos y en comercio se extienden a todo el mundo. Hay rutas navales fundamentales en Asia, en el Océano Índico, África, y en ambos lados del Pacífico que necesitamos proteger. Nuestra fuerza militar debe igualar el alcance de nuestra actividad económica y diplomática".

El EPL se está centrando en la marina y la fuerza aérea en su modernización, porque identificaron su relativa debilidad.

Cuando comience a operar, el portaaviones marcará un gran paso adelante en la fuerza naval china.

Estados Unidos observa este desarrollo de cerca. Por más de medio siglo, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, la marina estadounidense operó su flota de buques de guerra sin competencia en Asia y en el Pacífico, y posee 11 portaaviones.

El buque de guerra descansa en el puerto de Delian.

Los dos países observan con sospechas recíprocas sus programas militares. Muchos en el ejército chino creen que EE.UU. busca impedir su crecimiento.

Por su parte, Estados Unidos dice que el desarrollo militar chino no es transparente y está envuelto en secretismo, y que sus verdaderas intenciones no son claras.

"Durante mucho tiempo China negó que fuera a adquirir un portaaviones, incluso itentó hacer creer al mundo que la compra del primer portaaviones a Ucrania era para crear un casino en uno de sus puertos", opina Rick Fisher, analista de Centro de Evaluación y Estrategia Internacional, con sede en Virginia, EE.UU.

"Tendrá aeronaves comparables en capacidad a los recientes aviones caza de los portaaviones estadounidenses en dos o tres años".

Desplazamiento de poder

Algunos observadores creen que China quiere construir hasta cuatro portaviones.

Fisher, quien estudió las fuerzas armadas chinas durante 20 años, considera que el país tiene grandes ambiciones.

"El portaaviones forma parte del cumplimiento de su meta histórica fijada en 2004, que estableció que el Ejército Popular de Liberación defenderá de forma creciente los intereses del Partido Comunista fuera de China", dijo Fisher a la BBC.

"Para el año 2020, China quiere tener una fuerza militar que se pueda desplegar en todo el mundo y que sea capaz de desafiar los intereses estadounidenses allí donde deban ser desafiados", concluyó.

El mes pasado, la visita al Pentágono de Chen Bingde, el jefe del Estado Mayor del EPL, fue promocionada como un gesto para mejorar las complejas relaciones entre China y Estados Unidos.

Las orquestas militares de los dos países tocaron juntas mientras el general Chen estuvo en Estados Unidos.

Chen intentó despejar temores al decir que China nunca buscaría igualar el poder militar estadounidense. Su país esta muy por detrás de Estados Unidos, afirmó.

"En esta visita a Estados Unidos vi su asombrosa fuerza militar. No sólo no tenemos capacidad para desafiar a Estados Unidos, sino que además su fuerza naval y aérea, y su estrategia, son realmente disuasivas para nosotros", declaró Chen Bingde.

En general, se cree que el desarrollo de las fuerzas armadas chinas está 20 años por detrás de las estadounidenses.

Pero en su veloz expansión, China se concentra en armas diseñadas para neutralizar el poder militar de Estados Unidos.

El EPL he hecho una gran inversión en submarinos, y se cree que está cerca de desplegar el primer misil balístico diseñado para hundir portaaviones ubicados hasta a 1.500 kilómetros de la costa.

También está construyendo su propio avión caza casi "invisible" junto con avanzados aviones para operar desde un portaaviones, construidos a partir de diseños rusos.

Todo esto podría alcanzar objetivos estadounidenses - bases, buques y portaaviones - en Asia, y puede hacer que para Estados Unidos sea mucho más peligroso operar cerca de la costa china.

En cualquier conflicto futuro, el nuevo equipamiento militar chino puede limitar la libertad operativa que EE.UU. desearía.

En su momento, podría dar más espacio para que China extienda su músculo militar en Asia.

Tener un portaaviones le permitirá proyectar su poder más lejos que hasta ahora.

Por eso, Vietnam, Filipinas y Malasia - que mantienen disputas territoriales con Beijing en el mar de China - observan este desarrollo con preocupación.

Y Taiwán, Corea del Sur y Japón - que confían en Estados Unidos para su seguridad - pueden comenzar a preguntarse cuánto puede protegerlos realmente en el futuro.

Esto puede, algún día, socavar las garantías de seguridad estadounidense y su influencia en la región.

Queda mucho trabajo por hacer antes de que los portaaviones chinos se conviertan en una fuerza poderosa.

Pero, mientras descansa en el puerto de Dalian, la nave es un claro signo de las ambiciones navales de China y del desplazamiento de poder que puede propiciar.

Fuente:

http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/06/110608_china_portaaviones_poder_militar_np.shtml

domingo, 24 de abril de 2011

El desafío técnico de construir un portaaviones




Ensamblar un portaaviones es una labor titánica, incluso mayor que lo que el tamaño de la nave hace suponer.

En Escocia, en el norte del Reino Unido, se está construyendo el Queen Elizabeth, que pesará nada menos 65.000 toneladas y tendrá una longitud de 180 metros. Darle forma supone ajustar los engranajes de una maquinaria técnica y humana muy compleja.

Unas 10.000 personas trabajan en el proyecto, que tiene un costo superior a los US$8.000 millones. Otros 25.000 empleados están dedicados a la construcción de los aviones Lockheed Martin F-35 que irán a bordo del buque de guerra.

Las distintas partes del portaaviones se fabrican en distintos puntos del Reino Unido y serán ensambladas en el muelle seco escocés de Rosyth por una enorme grúa traída por mar desde China.

El portaaviones llevará entre 12 y 40 cazas F-35, cada uno de ellos valuado en US$106 millones.

"Es el mayor proyecto de construcción de un buque que se haya realizado para la Marina Real y, en términos de ingeniería, es el segundo en importancia luego de las obras para los Juegos Olímpicos de 2012 en Londres", dice el hombre a cargo de toda la misión, David Downs.

"Por las noches no duermo, preocupado por este trabajo", dice -medio en serio y medio en broma- Downs, quien es director de ingeniería del consorcio Aircraft Carrier Alliance (ACA, por sus siglas en inglés).

Inmensidad

El portaaviones Queen Elizabeth y su gemelo, el Prince of Wales, serán mucho más grandes que los construidos hasta ahora en el Reino Unido, aunque más pequeños que los que se han ensamblado en Estados Unidos.

Downs y su equipo diseñaron los buques utilizando programas informáticos. Es decir que cada centímetro de la embarcación cuenta con un "mapa electrónico". Valiéndose de este modelo, durante la construcción las medidas serán tomadas con láser para asegurarse de que cada pieza encaje en su lugar.

Obras del portaaviones Queen Elizabeth

Una sola pieza, apenas el 1% del barco.

El jefe de los equipos de trabajo, David Thomas, ha estado supervisando la inserción de algunas de los 450 cabinas y 150 cubículos con duchas -todos prefabricados- que irán en las entrañas de la nave.

Lleva consigo un pequeño manual que le muestra dónde va cada pieza.

Cualquier persona que encuentre difíciles las instrucciones para armar muebles hogareños seguramente considerará que la guía de Thomas es inextricable.

El proceso de construcción de un portaaviones comienza con la llegada al muelle seco de inmensas láminas de acero, que se moldean de varias formas y tamaños -algunas de ellas muy pequeñas- y se sueldan entre sí.

A estos elementos se les agregan otros fabricados en otras parte del Reino Unido, como las ya mencionadas cabinas de los tripulantes.

Así, las diversas secciones del buque van agrandándose para dar forma a las distintas cubiertas.

"La construcción naval me fascina", confiesa Lyn Gordon, una aprendiz de 23 años que trabaja en el proyecto.

"Me doy cuenta de que, con el tiempo, todo esto será un portaaviones; las láminas de metal se convierten en componentes y estos, a su vez, forjan el Queen Elizabeth".

El segmento del portaaviones en el que trabaja Lyn, en un astillero de la ciudad de Glasgow, debe estar listo para el verano boreal y luego ser transportado hasta Rosyth.

Marea baja

Muelle seco

La grúa gigante traída de China está siendo erigida sobre el muelle seco donde tomará forma el buque.

El muelle seco está casi listo para el proceso de montaje del Queen Elizabeth.

Unos 50 obreros chinos están ayudando a erigir la grúa de 93 metros que llegó a Rosyth desde Shanghái, atravesando el puente sobre el río Forth durante la marea baja.

Se espera que el portaaviones esté listo en 2016 como muy pronto y no podrá entrar en acción hasta 2020.

La construcción de su buque gemelo, el Prince of Wales, tiene el mismo cronograma.

La idea del gobierno es que uno de ellos esté operativo mientras el otro se mantenga en guardia permanente.

Tras la clic decisión de darles de bajaal portaaviones Ark Royal y a su flota de aviones Harrier, la marina británica no contará con un recurso militar de este tipo durante casi una década.

Por eso, los almirantes siguen con suma atención, conscientes del desafío técnico que representa, el ensamblado de las piezas del gigante de Rosyth.

http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/04/110418_portaaviones_como_se_construyen_pl.shtml